Sobre la que nuestro amigo Ávalon, tiene montada en la red social X.
"El debate no debe ser si es legal o no (que eso es arbitrio político/judicial) el debate tiene que ser ¿Es lógico/veraz/oportuno?
Y a continuación lo ilustra con unos gráficos:
Posteriormente añadió en el calor del debate otros dos gráficos más.
Tres días después, sigue la polémica, con la intervención estelar de la ministra de Sanidad, ministra que en el pasado llamó elementos inútiles a las propias mascarillas (quizás en un contexto callejero que no en el hospitalario).Me confirma un amigo por X que lo dijo en un contexto en el que se refería a los exteriores, ver aquí el original: https://www.elplural.com/politica/monica-garcia-critica-duramente-vuelta-mascarilla-obligatoria-no-necesitamos-medidas-inutiles_281002102 a continuación quitaré los post fraudulentos, (pido disculpas por haber caído en la celada y doy las gracias a mi amigo).
Estoy sorprendido de que el Partido Popular y Vox se hayan anticipado al movimiento de la ministra junto con ERC en Cataluña luego posteriormente se ha sumado Asturias todos ilegalmente puesto que no hay un nuevo decreto ley que dé cobertura legal a esas imposiciones, porque hablamos de imposición, no de recomendación sino de obligación de usarlas, esta es la polémica que hay actualmente.
El compañero Ávalon no se ha posicionado contra las mascarillas sólo ha señalado que son las mascarillas, para qué sirven y para qué son indicadas, argumentando que de no ser esos supuestos, son instrumentos de sumisión lo que él llama bozal.
En el pasado, a los esclavos les obligaban a llevar bozal durante cinco años se les llamaba por eso esclavos “bozaleros” y si se portaban bien al final de ese quinquenio se los retiraban, veamos una ilustración al respecto:
De toda esta polémica llegamos a la conclusión que lo que le molesta a Ávalon son las imposiciones irracionales, en cambio lo que les encanta a los poderes es la propia imposición, sea racional o irracional, eso sí, siempre la envuelven en el papel de regalo del bien común, un bien común que no se ve por ningún lado en la constantes fumigaciones de productos que presumimos que son tóxicos, que nos enferman por lo tanto, y que no dan ninguna explicación, y si sale algún erudito o alguien del gobierno, es para decir que son vapores de agua de los propios aviones, una mentira que no se sostiene y casi todo el mundo lo está viendo ya.
En la polémica de las mascarillas o bozales según los casos, estoy observando algo novedoso, algo que me ha llamado poderosamente la atención: el posicionamiento de bastantes sanitarios que se atreven a compartirnos y a pronosticar una resistencia activa por su parte.
Después de tres años de un silencio estruendoso me llama la atención que ahora salgan a la luz ¿Será porque han visto que ellos son los más perjudicados al tener que usar la máscara/bozal durante horas, conocidos como son los efectos adversos de su uso continuado?
Cuando he estado muy acatarrado y he tenido que ir al médico sin que nadie me dijera nada, me he puesto una máscara incluso para ir a comprar la fruta por responsabilidad.
¿Es que realmente no confían nada en nuestra responsabilidad, en nuestro criterio, que todo tiene que ser obligado? Y en vez de hacer una pedagogía pública de lo que es la responsabilidad personal.
Pero claro, eso choca con el nuevo invento: el enfermo “super contagiador asintomático” ¡Tócate los huevos con la palabreja! Contagiador asintomático es que eres un señor/señora/niño/niña, muy contagioso pero que no tienes ningún síntoma de la enfermedad.
Con ese criterio pueden diagnosticar lo que se les ocurra, mañana se les ocurre que yo soy un contagiador asintomático de esquizofrenia y me pueden ingresar en una institución psiquiátrica, esto es de locos y tenemos que pararles las pezuñas que dudo que tengan pies.
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