Ya estamos en otro escenario, han cambiado el decorado, antes era formalmente una monarquía parlamentaria, hoy es…no sé ahora mismo cómo definirla.
El paradigma ha sido cambiado totalmente(y esto tenemos que asumirlo para poder entender algo) por la IMPLANTACIÓN de la agenda 2030.
Todo el arco parlamentario, incluido el rey como representante del estado está metido en la agenda, la apoya fervientemente o con disimulo, pero permanece en su seno.
Ya no podemos decir como antaño: -Yo soy del PSOE, o yo soy del conservador PP…
Ni siquiera podemos decir: soy de derecha o izquierda…
Sólo podemos decir que en el pasado fuí o milité en…
Nuestras elecciones ya no son entre los partidos que no existen de facto, han sido fagocitados por personas, (es como los diputados de distrito que admiramos algunos).
El PSOE es la agrupación de un señor llamado Pedro Sánchez, ya no hay baronías ni comités de afiliados, solo existe la voluntad de Sánchez.
Lo mismo en las otras partes, todas son representaciones unipersonales.
Y todas ellas forman el menú de la agenda 2030 que nos destinan a nosotros “los presuntos” electores del sistema “democrático”.
Saldrán los que tengan designados que salgan los que realmente mandan, los electores solo somos parte del decorado y figurantes, que nunca tienen parte en el guión de la obra.
Yo me siento incapaz psíquicamente de participar como figurante, por lo que no iré a votar.
¿Porque soy antisistema? NO, desde luego, es porque me siento muy cansado de hacer teatro, además ya conozco la obra y no me gusta el final.
La agenda se está implantando gradualmente y de manera inexorable, vamos hacia una “sociedad” sin representaciones políticas, con una sola religión, la llamada Casa de la Familia Abrahámica:
Siempre los Simpson hablando gráficamente. SIMPSON SIMPSOSIMPSONN
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