Nuestro amigo minimalista Ávalon en su Tribuna, constantemente nos está dando la “brasa” con las cadenas mundanas o carnales y la necesidad de liberarse de ellas para ser feliz en esta vida y hacer méritos para la otra. Pues bien, algunos han tomado medidas drásticas en mi parecer, pero en armonía con lo que se dijo hace unos miles de años.
Dos ejemplos prácticos aunque radicales: El escritor vende su instrumento con el que se ganaba el pan, para pagar su vicio que le esclaviza, y el otro -tildado de loco- eliminarse el apéndice que le esclaviza; desde luego esa mujer ya no le esclavizará más con su vagina. Se dijo: “si un ojo te esclaviza, sácatelo, y si tu mano es causa de tu perdición: córtala, es preferible entrar mutilado que perderte entero”.
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Estas noticias no me molestan, sólo me llaman la atención, y en estos momentos de confinamiento obligado por Filomena me apetece escribirlo, a pesar de lo dicho lo escribo... y a la papelera.
Dices estimado amigo que os estoy "constantemente nos está dando la “brasa”", :) :) pero es por vuestro bien, he encontrado el camino y quiero que vosotros lo sigáis también para que viváis felices y os salvéis, porque con vuestra "carnalidad" desaforada lo estáis poniendo muy difícil, os aseguro que tendréis a vuestro ángel custodio hasta las narices y a punto de dimisión. Un abrazo y como se decía al final de un programa de nuestra niñez: " sed buenos".
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